Ficha de Lola

Lola fue abandonada tras siete años por aquellos que se llamaban su familia, que decían que la querían y prometían cuidarla para siempre. Los días que pasó en un jaulón del albergue posiblemente fueron los peores de su vida escondida tras su camita o refugiada en su arenero, esperando a que una mano amiga se pose sobre ella para acariciarla y, lo peor de todo, sin apenas comer, lo que le derivó a una pancreatitis. Su mirada de entonces lo decía todo: temor, incomprensión, desasosiego, pero también ternura, dulzura y amor, sobre todo amor. A pesar de todo, a Lola le sonrió la diosa de la fortuna cuando encontró una grandísima casa de acogida en la que la adoran, la cuidan y controlan su enfermedad de la que está mejorando mucho, por lo que ahora vuelve a ser feliz. Ahora lo único que le falta es una familia definitiva que le devuelvan todo lo que le robaron: amor a raudales y un hogar seguro, un hogar de verdad.