Adopción de Mateo

Mateo fue abandonado dentro de un transportín con sus hermanos Milo, Malena y Martín a la misma vez que la otra camada de panteritas (Sombra, Senda y Sennet). Abandonados en plena oscuridad en las cercanías del albergue sin saber el tiempo que podrían pasar allí, sin saber si alguien los encontraría a primera hora o a mediodía con el sol en todo lo alto; por supuesto sin comida y sin agua. Los peques estaban todos asustados, flaquitos, hambrientos, con pulgas y con los ojitos regular. Por fortuna, todos se han ido recuperando perfectamente y están preparados para tener una familia.
Mateo es completamente de color negro, con el pelito un poco largo y unos ojazos amarillos que son capaces de hechizarte. Por supuesto, es como cualquier otro jovenzuelo: alegre, divertido, cariñoso, juguetón, sociable, bello y todo un zalamero. Además, Mateo se lo pasa genial con sus hermanitos, por lo que sería ideal si se pudiese ir a una casa junto a uno de ellos para que siempre estén acompañados y nunca se aburran cuando no estéis en casa. ¿Qué os parece la idea? ¿Os animáis?