Adopción de Cula

Cula llegó a nosotros de un sitio horrible cuyo dueño tiene síndrome de Noe,ella estaba amamantando a sus bebés a los que cuido maravillosamente hasta que tuvieron edad de separarse. Al principio Cula se mostraba muy miedosa y tímida con las personas aunque nunca hizó ningún mal gesto y se dejaba manipular, pero se notaba que tanto ella como los demás podencos con los que llegó habían tenido una vida muy mala y una escasa relación con el humano. Ahora ya han pasado más de 6 meses y ha mejorado muchísimo, es un cielo de perrita con los voluntarios, sin embargo notamos que la vida en el albergue le pasa factura y no termina de consolidar su socialización. A veces ladra a los visitantes del albergue y no se acerca a los desconocidos lo que dificulta que alguien se fije en ella. Cula solo necesita un poco de paciencia, y ganas de enseñarle que no todo el mundo es tan horrible como su anterior dueño. Ya no tiene nada que temer.
Se lleva bien con otros perros de cualquier tamaño. La hemos llevado a varios eventos y se ha portado genial.