Adopción de Roxanne

Siempre me he tenido que buscar la vida por las calles. A mi corta edad, ya conozco el frío y la humedad de las noches en las que no encontraba refugio. Vivía en los alrededores de un colegio... bueno, por el día me marchaba de allí y por la noche regresaba en busca de tranquilidad. Venía una chica y nos ponía de comer y beber. Si no llega a ser por eso, a saber cómo estaríamos.
Siempre me he considerado diferente a mis compis de colonia. Ellos jamás se dejaron tocar, sin embargo yo, buscaba la compañía humana. Esperaba que algún día, alguien me sacara de aquella incertidumbre. Por suerte ya llegó ese día y ahora formo parte de Asoka, de esa gran familia.
Lo primero que han hecho es llevarme el veterinario para ver cómo estaba. He dado positiva en VIF, pero no tengo ningún síntoma y así puedo estar años, si no tengo estrés ni ansiedad. También me han bautizado... ROXANNE, como la canción. Ahora dicen que me van a buscar un sitio calentito dónde pasar el resto de mi vida, junto a personas que me respetarán. Sólo espero que no tarden mucho porque lo estoy deseando.
No es por presumir pero soy muy simpática y cariñosa. He oído que lo dicen y sé que es verdad. Cuando veo que alguien se acerca y me mira, enciendo el motor y lo pongo a tope. Entonces consigo lo que quiero, que me acaricien y me digan cosas bonitas que no entiendo pero aissss... suenan tan bien!! Ojalá estuvieran todo el día así. A ver si tengo aún más suerte y vienen a conocerme. No los voy a dejar escapar!