Adopción de Tula

Tula es otra de las asoketas que no ha tenido mucha suerte en su corta vida, pues durante todos los meses en que era una bebé vivió en un hogar con personas a las que ella consideraba su familia, pero de repente, ya no la quisieron más y la abandonaron. ¿El motivo? Había dado positivo a leucemia y la rechazaron. Tula es una gata carey pequeñita pero llena de amor y dulzura, que al principio puede mostrarse un poco tímida pero con una buena sesión de mimos te has ganado su confianza para siempre y sus infinitos ronroneos, en realidad, eso es lo que ella más desea, que la cojan en brazos y la acaricien interminablemente. Como siempre os decimos, dejaros los prejuicios a un lado y adoptar en positivo, seréis felices por siempre jamás.